LA ALDEA GLOBAL VIAJA EN METRO
Esta mañana he visto un anuncio en el metro de Money Gram que me ha llamado la atención. Una foto del minarete de una mezquita venía acompañado del siguiente texto en árabe y francés: "Money Gram les desea un feliz mes del Ramadán". He tenido que retroceder sobre mis pasos para comprobar que era cierto lo que había leido: "feliz mes del Ramadán".
Poco a poco, España se está convirtiendo en un país multicultural y plurirracial (¿esto existe? ¿Me lo acabo de inventar?), un proceso que ninguna verja va a poder parar. En un par de décadas, los hijos de los inmigrantes serán españoles de raíces árabes, orientales o sudamericanas. Como en Estados Unidos, donde hay muchas minorías raciales diferentes pero nadie dudaría de su "americanismo".
Lástima que, a la vez, cada vez sea mayor el racismo de nuestra sociedad... Supongo que tendremos que ir acostumbrandonos a que la integración sea algo más que ir de vez en cuando a comer un kebab. En el fondo, son más las cosas buenas que podemos sacar de este proceso que las malas.
Hale, reflexión profunda del día. Ayer por la tarde celebré mi cumpleaños en el Diurno con mis mejores amigos, los que me llevan aguantando durante la última década (faltó Sito, pero la lluvia torrencial le impidió llegar hasta la cafetería). Fue agradable estar todos juntos. Me gustó: son como mi familia. ¡Pero hace dos días que fue mi cumpleaños y aun no he recibido un miserable regalo!
Poco a poco, España se está convirtiendo en un país multicultural y plurirracial (¿esto existe? ¿Me lo acabo de inventar?), un proceso que ninguna verja va a poder parar. En un par de décadas, los hijos de los inmigrantes serán españoles de raíces árabes, orientales o sudamericanas. Como en Estados Unidos, donde hay muchas minorías raciales diferentes pero nadie dudaría de su "americanismo".
Lástima que, a la vez, cada vez sea mayor el racismo de nuestra sociedad... Supongo que tendremos que ir acostumbrandonos a que la integración sea algo más que ir de vez en cuando a comer un kebab. En el fondo, son más las cosas buenas que podemos sacar de este proceso que las malas.
Hale, reflexión profunda del día. Ayer por la tarde celebré mi cumpleaños en el Diurno con mis mejores amigos, los que me llevan aguantando durante la última década (faltó Sito, pero la lluvia torrencial le impidió llegar hasta la cafetería). Fue agradable estar todos juntos. Me gustó: son como mi familia. ¡Pero hace dos días que fue mi cumpleaños y aun no he recibido un miserable regalo!
4 comentarios
Joserra -
mce79 -
Maggie Wang Kenobi -
Eso sí, en este país, siendo receptor tardía, los que debían haber puesto los medios para que no surgieran los problemas de racismo y delincuencia y demás que conlleva este proceso, no han hecho na... endeluegoooo, me vi a comprar una isla desierta pa mí solo y mis amigas superricas, ea ¡Y no vantrar ni dios!
Juan -