EL LADO OSCURO
El de ayer fue un domingo bastante anodino. Vi dos pelis en DVD. La primera fue "Cosas que no se olvidan" (el título original, "Storytelling" es mucho mejor), una película de Todd Solonz con personajes de los considerados raritos o disfuncionales. La segunda fue "Más extraño que la ficción", una película con una historia curiosa aunque no tan original como el guionista se cree (me recordó bastante a "El hombre del tiempo" o "Adaptation", entre otras), intelectual pero con final optimista.
A mí me gustan más las películas como esta última, las que muestran una visión positiva del hombre como un ser capaz de enfrentarse a sus miserias y vencerlas. Pero me pregunto si no me estaré engañando a mí mismo al negar que en este mundo predominan los perdedores patéticos, la gente pagada de sí misma, los que guardan secretos que les atormentan, los imbéciles, las personas malvadas, hombres y mujeres víctimas de sus obsesiones...
Por eso siempre termino escribiendo historias con final feliz, vitalistas, incluso moralistas, pero frías e intelectuales.
Un profesor me dijo, a raiz de un ejercicio que escribí, que hasta que no me atreviera a bucear en mi lado oscuro no terminaría de encontrar mi propia voz.
Pero si ya me cuesta compartir las historias que nacen de mi lado luminoso -es más, si ya de hecho me cuesta sacarlas de mi interior-, ¿cómo afrontar las que nacen de mi lado oscuro sin sentir un profundo rechazo hacia ellas? ¿Pero cómo escribir de verdad sin asumir que todo tiene un reverso tenebroso? Sin lo malo, lo retorcido, lo oscuro, lo secreto, lo vergonzoso, lo cruel, lo trágico... ¿cómo escribir historias que resulten auténticas? ¿Y cómo escribirlas sin sentir que me estoy desnudando ante el mundo?
De ahí que escriba tan pocas cosas de verdad.
Y de ahí, quizás, que lo mejor que haya escrito nunca sean algunos fragmentos de mi diario personal, del que muy pocas personas han podido leer alguna página.
15 comentarios
MadRod -
En cuanto a los lados oscuros, siempre he pensado que el primer relato de un escritor se basa en un tanto por ciento elevadísimo en su vida o su propia experiencia, pero a partir del segundo el tanto por ciento va bajando para dar paso a la observación. La maldad, la oscuridad, lo enfermizo, no tiene por qué estar relacionado contigo si te conviertes en un buen transmisor, que es en lo que se convierte todo buen narrador, en un observador que cuenta lo que ve con cierta gracia.
Pero bueno, no deja de ser un punto de vista. Al final, no sé si Clive Barker está así de loco ni dónde ha podido observar sus vómitos novelados...
Soliloco -
Corredero -
¡Qué fuerte me parece todo!
:-P
ace76 -
Pues sí, Jordi, sin el lado malo, el lado bueno pierde valor. Y gracias por tus halagos. :-)
Jejeje, me ha gustado mucho lo de los níscalos, Rodri.
Joserra, yo me refiero más bien a lo duro que puede ser enfrentarse a esas cosas raras a la hora de escribir. En "Storytelling", por ejemplo, hay una escena de sexo bastante enferemiza, una serie de personajes que se manipulan los unos a los otros sin importarles los sentimientos ajenos, un niño repelente, un asesinato a sangre fría... Si realmente te involucras en lo que escribes, puede resultar bastante agotador y duro. ¿Puede mi personaje matar a alguien? ¿Voy a hacer que se redima o que se condene? ¿Qué parte de mí estoy volcando en esta escena? ¿Hacen mis personajes lo que yo no me atrevo a hacer? ¿Realmente quiero que los demás lean esto?
Y eso que, en efecto, yo tengo muy poco de oscuro y atormentado...
Joserra -
MadRod -
Por otro lado, no creo que la buena gente, las personas sin dobleces ni lados oscuros, carezcan de autenticidad. Puede que una amanita venenosa sea realmente atractiva a los ojos del gran público, pero los níscalos también tienen su vida interior, coña.
Jordi -
Ojalá tuviera la suerte de leer tu diario. Sin haberlo leído estoy convencido de que encierra escritos preciosos pero ¿verdaderamente es posible superar los que compartes con nosotros? Jejeje. Besos.
mce79 -
Shhh! -
Salen ganando todos... y pues ser todo lo oscuro que te de la gana... siempre habrá alguien más podrido que tú!
ace76 -
mce79 -
ace76 -
Y también es muy difícil escribir sobre personajes que tienen una moral distinta a la tuya sin condenarles de antemano, o que te salgan malos de opereta. Porque si todos los personajes son pequeños aceitos, acaban siendo todos el lado amable de Ace. Y eso hace que a los relatos les falte autenticidad.
ace76 -
El lado oscuro aporta profundidad y dimensión, Deca. Incluso puede resultar atractivo. Pero es complicado trabajar con él. Porque siempre hay el lado oscuro más oscuro.
DeCa -
mce79 -