DE VUELTA
Y aquí estoy, otra vez en el trabajo. En unas pocas horas, las vacaciones y las Navidades quedan atrás, sumergidas en un olvido lejano. Lentamente vuelve la cotidianeidad. Suelo tener la sensación de que el año no comienza de verdad hasta que no vuelvo a Madrid. Pamplona es como un oasis de tranquilidad, viejas amistades, recuerdos disperos y diversas sorpresas. Esta vez he decidido releer uno de los libros que más me marcó en mi preadolescencia: "La historia interminable". Hace poco vi la película por televisión y me picó la curiosidad por volverlo a leer, más de diez años después. Las películas que se han hecho inspiradas en el libro (creo que han sido tres) no le hacen justicia, reducen la historia de la búsqueda de Bastián a una visión demasiado infantil. He disfrutado releyendo el libro, ha sido como un reencuentro con viejos amigos y he descubierto matices y nuevos significados que antes había olvidado.
Estas vacaciones me di cuenta de que, aunque todo es igual, todo es diferente. El 15 de febrero de 1995, fui a mi primer concierto en directo: REM, en el velódromo de Anoeta, en San Sebastián. La primera canción que tocaron fue "What´s the frequency, Kenneth?". Tengo la sensación de que aquella noche comenzaron muchas cosas en mi vida: nuevos horizontes, nuevas amistades, todo lo que significa ser un joven de 18 años que comienza a descubrirse y a descubrir el mundo... Este sábado fui con mi hermano al concierto que dio REM en Vistalegre, aquí en Madrid. La primera canción que tocaron en el bis fue "What´s the frequency, Kenneth?". Y mientras sonaban los guitarrazos y yo daba botes como un loco, tuve la sensación de que se estaba cerrando un ciclo, de que en 2004 he cerrado caminos, he llegado a metas, he encontrado cosas que ni siquiera sabía que buscaba o necesitaba.
Pero el concierto no terminó ahí, siguió. Y del mismo modo, me he dado cuenta de que las metas a las que he creido llegar plantean nuevos desafíos, nuevos caminos que recorrer, nuevas sorpresas. He cerrado un ciclo, y ahora abro otro... ¿Dará REM otro concierto en España en 2015?
Estas vacaciones me di cuenta de que, aunque todo es igual, todo es diferente. El 15 de febrero de 1995, fui a mi primer concierto en directo: REM, en el velódromo de Anoeta, en San Sebastián. La primera canción que tocaron fue "What´s the frequency, Kenneth?". Tengo la sensación de que aquella noche comenzaron muchas cosas en mi vida: nuevos horizontes, nuevas amistades, todo lo que significa ser un joven de 18 años que comienza a descubrirse y a descubrir el mundo... Este sábado fui con mi hermano al concierto que dio REM en Vistalegre, aquí en Madrid. La primera canción que tocaron en el bis fue "What´s the frequency, Kenneth?". Y mientras sonaban los guitarrazos y yo daba botes como un loco, tuve la sensación de que se estaba cerrando un ciclo, de que en 2004 he cerrado caminos, he llegado a metas, he encontrado cosas que ni siquiera sabía que buscaba o necesitaba.
Pero el concierto no terminó ahí, siguió. Y del mismo modo, me he dado cuenta de que las metas a las que he creido llegar plantean nuevos desafíos, nuevos caminos que recorrer, nuevas sorpresas. He cerrado un ciclo, y ahora abro otro... ¿Dará REM otro concierto en España en 2015?
8 comentarios
Juan carlos v. -
ace76 -
Sí, la imagen de la vida como una espiral (de dentro afuera) me parece bastante acertada. Me gusta.
Ángela -
Yo creo que nunca se cierran del todo los ciclos, más bien hay una continuidad hacia un nuevo ciclo, como una especie de espiral que va en la que viajamos de dentro hacia fuera, circundando los anteriores círculos...y no, no voy colocada por muy psicodélico que parezca lo que digo...
Su -
Joserra -
Y qué pena que REM no cantara la de Shiny (se escribe así?) happy people, canción super chula y super comercialona.
Mola, molaaa
Miguel -
Esta tarde me dedicare a editar la grabación, a ver si se puede salvar algo decente.
ace76 -
Yo creo que he releido muy pocos libros en mi vida, pero voy a empezar a hacerlo. A pesar de todo lo que me queda por leer aun...
Inakov -
Y haces bien en releer "La Historia Interminable". Yo lo hice hace unos dos o tres años y fue un gusto volar de nuevo en los lomos de Atreyu. Y sí, las versiones cinematográficos son una absoluta bazofia.