INDOLENTE
Perezoso, negligente, descuidado y tardo en las operaciones.
Así soy yo!
Qué mal.
Cuando iba al colegio, en la cartilla de calificaciones, aparte de las notas, te ponían positivos o negativos en varias categorías de las asignaturas. Una de ellas era "esfuerzo". A mí me pusieron muchos sobresalientes, pero positivos en "esfuerzo", nunca. Siempre se quedaba la casilla en blanco. Mi madre siempre me decía que "hay que esforzarse", pero, claro, por otra parte, también decía eso de "es que el niño es tan listo que no necesita esforzarse para sacar buenas notas". Eso es cierto. Sacar buenas notas siempre se me ha dado bien. Soy medianamente inteligente, tengo buena memoria y sé articular un discurso que relacione ideas de forma coherente. Nunca fui lo que se dice un empollón, o al menos, yo no me lo considero. Sí que era disciplinado, iba a todas las clases, me leía los libros, hacía esquemas y resúmenes. Pero siempre odié hacer codos. Recuerdo las noches temáticas en temporada de exámenes como sesiones de tortura mental, angustia y auténtico dolor físico... y recuerdo las mañanas que me pasaba solo en casa, dando vueltas por por la sala, el recibidor y el pasillo recitando en voz alta los tipos de plano, las clases de micrófonos que existen, el esquema de Syd Field para escribir un guión, el paradigma de Laswell o el funcionamiento de las instituciones jurídico-políticas de Alemania.
De todas formas, recuerdo con especial alivio el aprobado raspado que saqué en Empresa Informativa. Yo sigo pensando que el profesor Nieto se confundió al corregirme el examen, porque es el peor que hice en toda mi vida, de lejos. Nos iban dictando las preguntas una a una y nos daban un tiempo determinado para contestar. Y claro, cuando el enunciado "Características de la Sociedad en Comandita" no te suena ni lejanamente y te dicen "diez minutos para contestar", ¿qué haces? ¿Desesperarte? Pues no, echar mano de la inventiva, que de eso nunca me ha faltado, y confiar en arañar unas miserables décimas. Además, recuerdo que se me olvido el tipex y que el bolígrafo funcionaba mal e iba dejando manchas de tinta por la la hoja. Tachones por todas partes, frases incoherentes y respuestas inventadas. Hice mal hasta las sumas y restas del balance. En fin... a veces suceden los milagros. Menos mal.
Lo que sí me gusta es aprender cosas nuevas. Hacer trabajos de investigación, leer libros, discutir temas, comentar textos o analizar obras de arte, eso me encanta... La verdad es que no me imagino haciendo otra carrera. Bueno, sí, siempre he querido hacer Psicología. Siempre aplazo mi proyecto de matricularme en la UNED... quizás este año sí lo haga. Pero soy tan indolente... Qué mal.
Claro, que, por otra parte, vivo tan feliz siendo como soy... :-)
(y afortunadamente, no siempre soy indolente)
11 comentarios
ace76 -
:-P
sti -
Que tus matrículas de honor salían gratis a la Universidad de Navarra.
Reconócelo, recono-cielo.
Maggie Wang -
DeCa -
Yo si te he visto como te esfuerzas, nene. :)
Jgts -
¡Apúntate a la UNED! Así me motivo yo también, que me lo estoy planteando y aún no sé si apuntarme o no...
Tony Tornado -
:PPPPPPPP
ace76 -
Pues evidentemente, me quedo con la acepción dos, la de perezoso. Santa pereza! :-)
Soliloco -
Siesqueee que nos gusta adornar las cosas con palabros
Joserra -
indolente.
(Del lat. indŏlens, -entis, insensible).
1. adj. Que no se afecta o conmueve.
2. adj. flojo (¡¬ perezoso).
3. adj. Insensible, que no siente el dolor.
ace76 -
Corredero -
:-P